Saltar al contenido

Lectura de la tirada del tarot

No es necesario desplegar muchas cartas para conocer algo específico. Basta con utilizar cinco cartas para saber lo que está sucediendo y lo que sucederá. Para hacer una tirada con 5 cartas, el mejor método es la Tirada en forma de Cruz Simple. La carta del centro de la cruz, que es la carta número uno, indica lo que está sucediendo en el presente del consultante.

La dos es la que nos muestra las cosas que están en su contra, al tiempo que la 3 es lo que está arrastrando desde su pasado próximo y lejano. La cuarta, es la que nos muestra lo que está a su favor.  La quinta representa el futuro y, también la solución al problema por el que se está consultando al tarot. Todas estas tarjetas se deben ir descubriendo en el orden de la numeración que acabamos de mencionar, como es apenas lógico. 

Ahora, todas y cada una de las cartas del tarot cuentan con un significado propio. Además de que el tarotista debe conocer esos significados, también es muy importante que disponga de una buena intuición.  En otras palabras, a medida que van saliendo o que son reveladas, las cartas van contando una especie de historia sobre el consultante.

Es una historia algo subjetiva, porque cada tarotista la puede interpretar a su manera o, lo que es lo mismo, según su propia intuición. En este punto, es donde se encuentra el quid del asunto, ya que es necesario que se interprete la tirada según lo que se intuya y más allá del estricto significado de las cartas. Lo mejor es hacer una lectura intuitiva, más que “automática”. Es la mejor manera de captar esa historia que cuentan las cartas. 

Las diferencias entre los Arcanos Mayores y los Menores 

Entonces, si en una tirada están presentes tanto Arcanos Mayores, como Menores, es preciso tener en cuenta que los primeros están enseñando hechos, situaciones y/o circunstancias más relevantes y más en el largo plazo del consultante, sea que se trate del pasado, de su presente o de su futuro.

Los efectos de lo que se ha leído son más durables en el tiempo, a la vez que enseñan situaciones que son prácticamente inmodificables, si el consultante no hace caso de los consejos que le brinde el tarotista.  Los Arcanos Menores, a su vez, tienden a representar la cotidianeidad o, si se prefiere, el día a día de quien se encuentra en consulta. Por ende, las predicciones suelen ser más cortas en el tiempo.

Su visión es en el corto plazo, al tiempo que se trata de hechos, situaciones y/o circunstancias que son más fáciles de modificar. Las predicciones no son tan determinantes ni contundentes.  En lo que respecta, en esta ocasión, a las llamadas “figuras de la corte”, digamos que el Rey, la Reina, el Caballero y la Sota representan a personas que tienen influencia en la vida real del consultante.

Tales son los casos de sus padres, hermanos, la pareja, los hijos, los jefes, los socios y demás, sean estos jóvenes, adultos y buenas personas o no.  Por otra parte, es muy importante tener con consideración que las figuras de la corte pueden representar la actitud del propio consultante, esto es, sus emociones y su postura respecto del problema por el que se está indagando. 

Ahora, no es fácil interpretar o leer a estas figuras cortesanas, porque, dependiendo de las otras cartas que hayan salido en la tirada, el tarotista podría pensar que la figura de la corte está “hablando” en nombre de una tercera persona o, bien, a nombre del consultante. 

Aquí, es donde entra en juego algo tan importante a lo que nos hemos estado refiriendo: su intuición. Además, si las cartas salen al derecho o, bien, al revés, es más que obvio que su significado puede variar ostensiblemente. Eso sí, debemos tener en cuenta que existen varias cartas que suelen ser más positivas si salen en sentido invertido, que si lo hacen al derecho. Tal es el caso de los  Palos de la baraja.  .